Los cíclopes son seres mitológicos que poseen un sólo ojo. Joyce elige este título como una metáfora refiriéndose a que el protagonista del capítulo no tiene un sólo ojo fisica sino mentalmente. ¿Por qué también lo hace físicamente? ¿Es una manera de decirnos que ese personaje es villano o tiene defectos? Debemos de tener en cuenta que durante el tiempo en el que el Ulises fue escrito, el fisico exterior era un reflejo del interior de esa persona. En cuanto a lo mental, su marco de referencia es delimitado y se muestra incapaz de ver más allá de su propia nariz. Vemos una persona quejica, inconformista y que pretende imponer su forma de pensar. Todo esto no es tan malo hasta que vemos en él una persona tirana a la que a día de hoy muchos de nosotros detestaríamos. La xenofóbia contra los judíos es la muestra más repetida durante todo el capítulo: “Me tuve que reír con ese enano de judío hecho una fiera. El beber a mí mi té. Él comer a mí mi azúcar. ¿Porque él no pagar a mí mi dinero?” Desafortunadamente, las reacciones racistas no son hoy en día agua pasada. Facebook es una corriente de opiniones y bajo mi propia experiencia puedo decir que mucha gente siente cierta intolerancia y desagrado hacia la comunidad musulmana tras los mutuos atentados entre Francia y Siria. Aunque, desgraciadamente, no es necesaria una guerra para que el racismo esté presente en nuestras vidas. Muy frecuentemente hemos visto a jugadores de fútbol sufrir abucheos e insultos por su color de piel.
El ser humano es complejo, sentimos de distinta manera y a la vez somos muy parecidos. Por ello, Joyce defiende la tolerancia, la comprensión y la riqueza que nos aportan nuevos caminos y culturas. El autor sabe defender esto inteligentemente: mostrando alguien que se manifiesta en contra de los derechos y las libertades ajenas y mostrando al débil. Cualquiera puede sentirse identificado al ser excluído. No es sólo importante el hecho de no aceptar o tolerar a alguien sino la forma en la que esto es expresado durante el capítulo, de una manera violenta y degradante como lo hace el protagonista de “los cíclopes”. Los extremos y los excesos son peligrosos por muy representado que uno se sienta.
Joyce continúa en su línea de lo escatológico como vimos con la flatulencia en el capítulo once. En este caso lo hace cuando dos hombres en la taberna comentan que un señor al ahorcarse sufrió una erección: “La pasión dominante dura hasta la sepultura” dice el protagonista que narra la historia. Percibo cierta virilidad y orgullo de su sexo, algo que lo convierte en una persona que se siente superior al resto. A la misma vez, siento cierto desconocimiento de la realidad por su parte. El personaje permanece en un estado tan subjetivo y propio, que para él, el único motivo es el que su cabeza le llegue a dar. Creo que es un hombre que se deja llevar por sus impulsos y no racionaliza ni le da un sentido lógico a las cosas como Bloom le aclara: -Eso lo puede explicar la ciencia, dice Bloom. No es más que un fenómeno natural [...] Bloom actúa como la voz de su conciencia, como el corrector de sus injusticias. Bloom es todo lo que el protagonista no esta dispuesto a ver, ya que es un cíclope. Gracias a este personaje, Bloom evoluciona como protagonista de Ulises. Se vuelve más humano, una persona común con los pies en la tierra y preocupado de su vida diaria, de sus facturas, etc… Y a la vez, éste es más querido ya que se muestra en contra de la actitud tan desagradable por parte del protagonista. Se podría decir que Bloom se convierte en el defensor del lector ya que considero que la actitud retrograda es una gran falta de conocimiento, al contrario que Bloom. Y esto explica su irritación hacia él: “De acá para allá con su libro y lápiz dándoselas de enterado y sin dar golpe [...] Don Sabelotodo. Se las sabe todas.” Ciertas veces, aunque en menor medida, me he sentido como Bloom. Mucha gente mayor, debido a su gran experiencia a lo largo de la vida, se muestran opuestos a los cambios, a la evolución, a distintas maneras de pensar o de actuar. En ciertos aspectos pueden equivocarse por el hecho de no poder abrir su mente a algo diferente por el hecho de haber convivido con un cierto estilo de vida durante toda su existencia. El ser humano odia los cambios aunque es un ser altamente adaptable. Me imagino al protagonista de este capítulo como alguien de avanzada edad y que se ha estancado en algún punto de su vida. Sus principales preocupaciones es su patriotismo irlandés e imponer sus ideales a cualquier precio, ante cualquier persona.
El hecho de que Bloom defienda el amor, en contra de lo que el protagonista hace, lo heroiza de una manera sublime: -Pero no vale de nada, dice él. La fuerza, el odio, la historia, todo eso. Eso no es vida para los hombres y las mujeres, insultos y odio. Y todo el mundo sabe que es precisamente lo contrario lo que es la vida de verdad. -¿Qué? dice Alf. -El amor, dice Bloom.” Bloom es una esperanza en la comprensión del ser humano en todos sus aspectos. Es bondad y reprocha al protagonista que, a parte de su agresividad al tirarle un lata de galletas o las innumerables faltas de respeto, tanta aferridad a sus ideales le convierte en una persona hipócrita, ya que su propio dios es judío también. Esto es una manera de demostrar que la intolerancia a algo es propiamente intolerable. ¿Es algo contra lo que hoy día debemos luchar?, ¿Encuentras presente la intolerancia hacia otras razas? Aquí vemos que los principios no son honestos ni buenos si se pisotea al inocente. Todo esto provoca que, al acabar el capítulo, tengamos aversión a este personaje. Su propia actitud arrogante, prepotente y poco humilde lo convierte en un villano protagonista, haciendo a Bloom el verdadero héroe de la historia. Este capítulo se podría resumir en una sola palabra: Respeto.
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